miércoles, 11 de diciembre de 2013

PENSAMIENTOS.

Todo lo que somos, 
podemos y valemos 
lo hemos de poner 
amados hijos al servicio del Señor, 
de quien lo hemos recibido y
 a cuya gloria se ordena.   OCLA 518



No es posible amar a Dios
 sin amar por Él tambièn 
al hombre su obra predilecta,
 ni amara a éste con verdadero amor de caridad, 
si se prescinde del amor de Dios 
ambos amores son como 
rayos emanados de una misma luz y 
como flores de un mismo tallo.  OCLA 1044
                     



                     En verdad que
                        nada más perfecto,
                        ni más santo,
                        ni más grato a los divinos ojos
                        podemos hacer en este mundo,
                        amados hijos,
                        que la omnímoda conformidad
                        de nuestra voluntad
                        con la divina.  OCLA 1336
 
 
                        Nadie debe engreírse
                        por los bienes,
                        favores o gracias
                        recibidas del Señor,
                        que los concede
                        según su voluntad santísima;
                        ni juzguen por ello ser más
                        que sus hermanos, quienes,
                        si carecen de ellos,
                        también es
                        por disposición de Dios.  OCLA 1165

LA MISIÓN DE SUS HIJOS EN EL MUNDO DE HOY


HERMANOS TERCIARIOS CAPUCHINOS DE NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES.


Con la experiencia adquirida durante sus más de 120 años de existencia, los amigonianos dirigen hoy en diversas partes del mundo:
  • Centros de Observación.
  • Centros de protección de niños y adolescentes.
  • Centros de readaptación social.
  • Hogares o casas de familia.
  • Obras sociales en barrios marginados.
  • Comunidades terapéuticas para la recuperación de farmacodependientes.
  • Capellanías en cárceles.
  • Universidades.
  • Colegios.
  • Centros de estudios e investigación psico-pedagógica.
  • Parroquias.

En la actualidad los Terciarios Capuchinos están presentes en 20 naciones de Europa, Asia, Africa y Europa. Están organizados en cuatro provincias religiosas,así:
  • Provincia de Luis Amigó (España, Alemania, Polonia y Costa de Marfil). Casa Provincial en Madrid (España).
  • Provincia de San Francisco (Italia y Filipinas). Casa Provincial en Galatone (Italia).
  • Provincia de San José (Brasil, Colombia y Ecuador). Casa Provincial en Bogotá (Colombia).
  • Provincia del Buen Pastor (Costa Rica, Panama, Guatemala, Nicaragua, Puerto Rico, República Dominicana, Chile, Bolivia, Argentina, México y Estados Unidos). Casa provincial en San José (Costa Rica).

HERMANAS TERCIARIAS CAPUCHINAS DE LA SAGRADA FAMILIA




  1. Pastoral Educativa: Queremos revitalizar nuestra misión educativa fundamentada en los principios científicos, pedagógicos, filosóficos, evangélicos y carismáticos, para que respondan a los desafíos del Tercer Milenio.
  2. Pastoral Catequética: Buscamos dinamizar la pastoral catequética para favoreces la iniciación cristiana, la madurez y vivencia de la fe y el compromiso como bautizado.
  3. Pastoral Juvenil Vocacional: Buscamos asumir esta pastoral como prioridad personal y comunitaria, para que los jóvenes descubran el plan de Dios en sus vidas y respondan a su llamada con generosidad.
  4. Pastoral Familiar: Trabajamos por impulsar procesos de acompañamiento y ayuda pastoral a los distintos tipos de familia, para que lleguen a ser comunidades de amor cristiano, educadoras de la fe, formadoras de personas, promotoras de desarrollo y defensoras de la vida.
  5. Pastoral Preventiva Reeducativa: Propiciamos el desarrollo armónico de la personalidad de los niños y de los jóvenes de nuestros centros de protección y reeducación mediante la aplicación de principios pedagógicos, evangélicos y amigonianos que les posibilite la reinserción al medio familiar y social.
  6. Pastoral Salud: Intentamos ser presencia evangelizadora a favor de la vida, el respeto a al persona y la humanización del dolor, como oportunidades de encuentro con el Cristo sufriente de nuestra sociedad.
  7. Misiones y Obras Pastorales: Nos esforzamos por anunciar el amor de Dios “Padre” y la presencia de Cristo resucitado en medio de nosotros a través de su Espíritu, para iluminar con su Evangelio, la promoción humana integral y la defensa de la vida.
  8. Movimiento Laical Amigoniano: Queremos compartir nuestro carisma y misión con los laicos, para poder ser entre todos presencia misericordiosa de Jesucristo Buen Pastor en nuestra sociedad
Compartimos nuestro carisma y vida con hermanas y hermanos de 31 países, nuestra última fundación ha sido en la India.

  1.  Argentina
     Puerto Rico
     Bolivia
     Brasil
     Colombia
     Dominicana (Rep.)
     Costa Rica
     México
     Cuba
     Chile
     Ecuador
     Guatemala
     Honduras Nicaragua Paraguay            Perú PanamáVenezuela
     Italia
     Alemania
     Bélgica
     España
     Eslovaquia
     Polonia
     Congo(Rep.D.)
     Benín 
     Guinea Ecuatorial
     Tanzania
     Filipinas
     Corea del Sur
     India
     Suiza
     Centro África
     China

SUS OBRAS APOSTÓLICAS


HERMANAS TERCIARIAS CAPUCHINAS DE LA SAGRADA FAMILIA.

En el Santuario de la Virgen de Montiel (Benaguacil – Valencia – España), el 11 de mayo de 1885 fue el día marcado en el reloj de Dios para que –por la acción del Espíritu santo, y por medio de el Padre Luis Amigó- comenzará su trayectoria histórica la Congregación de Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia.
Todo empezó a surgir a raíz del apostolado que el Padre Luis ejercía con las mujeres de las Congregaciones de la Tercera Orden Franciscana Seglar establecidas en los pueblos cercanos al Convento de La Magdalena, donde él residía.
Fueron aquellas seglares comprometidas las que ayudaron de forma determinante al Padre Luis a descubrir que Dios le llamaba a ser el iniciador de una nueva familia religiosa en el seno de la Iglesia.
Para ellas, a su medida escribió el Padre Luis Amigó las Constituciones. Pero antes de que se llevase a cabo la fundación canónica, unas piadosas mujeres que venían haciendo vida conventual en el Santuario de la Virgen de Montiel pidieron ser admitidas en el nuevo proyecto de vida. El Padre Luis lo consistió.
Nada más nacer, la Congregación recibió su bautismo de sangre, al desatarse en Valencia una epidemia de cólera y fallecer, atendiendo a los enfermos, cuatro hermanas. El sacrificio, sin embargo, no fue baldío. Como fruto inmediato del mismo se abrió en Masamagrell –el 9 de agosto de 1885- un Asilo para niños, que ampliaba decisivamente el campo apostólico de la Congregación, establecido hasta ese momento en el hospital de Benaguacil.
La Congregación siguió creciendo y abriéndose camino, intentando responder a los signos de los tiempos, por eso el 8 de febrero de 1905, cinco hermanas partieron para Riohacha – Colombia; en 1927 hacia Venezuela y en 1929 hacia China, así se fue abriendo el camino misionero de nuestra Congregación.

HERMANOS TERCIARIOS CAPUCHINOS DE NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES


Los Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los Dolores, también llamados Amigonianos, son una congregación religiosa creada el 12 de abril de 1889 por Luis Amigó Ferrer, religioso capuchino, en Masamagrell (Valencia).Originariamente se creó con catorce postulantes, primera casa la Cartuja del Puig (Valencia)"

La espiritualidad de los terciarios capuchinos es acoger a los jóvenes "marginados “por la sociedad según actualmente por su condición social, física, creencia, entre otras. 

CONOZCAMOS SU VIDA

Un recorrido por la vida de Luis Amigó  y Ferrer
Un recorrido por la vida de Luis Amigó y Ferrer
Fray Luis de Massamagrell es el nombre de religión del capuchino José María Amigó y Ferrer, fundador de las Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia y de los Hermanos Terciarios Capuchinos de Nuestra Madre de los Dolores, que nació en Massamagrell – Valencia (España) el 17 de octubre de 1854.


Infancia y juventud

Su infancia y juventud pasan en Valencia donde empieza sus estudios hacia el sacerdocio en el Seminario Conciliar de la ciudad. Era miembro de distintas asociaciones católicas que promovían un servicio de voluntariado hacia los más marginados.

En 1874, sintiendo la llamada del Señor a la vida consagrada en la familia religiosa de los Capuchinos y como en España habían sido expulsadas todas las ordenes religiosas, José Maria se marchó hacia el convento capuchino de Bayona, (Francia) y aquí vistió el habito franciscano el día 12 de abril del mismo año.


Capuchino y sacerdote 


Tres años más tarde Fray Luis de Massamagrell (èste el nombre con que se le conocía en la Orden), pudo regresar a España. 

El día 29 de marzo de 1879 recibió la ordenación sacerdotal y empezó a prestar su ministerio sobre todo en la cárcel de Dueso; aquí quedó muy impactado por el gran número de jóvenes encerrados en una cárcel tan mal atendida.

Quizá fue esta impresión, la que orientó parte de su apostolado llevándole a ser, con el tiempo y también por el trabajo de las dos congregaciones que fundó, un verdadero apóstol de la juventud en situación de riesgo y extraviada.

En la Orden capuchina, Padre Luis fue llamado a prestar servicios de grande responsabilidad como el de Guardián y Ministro Provincial.


Fundador



Fray Luis dio un gran empuje a la Tercera Orden Franciscana (hoy se le llama Orden Franciscana Seglar) y dentro de ella, del contacto con los jóvenes, nació en él la inspiración de la fundación de las Hermanas Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia que realizó en 1885.

En 1889, llevó a cabo también la fundación de un instituto masculino, los Hermanos Terciarios Capuchinos de Nuestra Señora de los Dolores, cuyo fin apostólico era educar cristianamente a los jóvenes extraviados del camino recto. 


Obispo 

En 1907 Fray Luis fue llamado a la guía pastoral de la diócesis de Solsona (Cataluña) y unos años más tarde, 1913, a la de Segorbe (Valencia).

El aceptó prestar este servicio que le pedía la Iglesia, permaneciendo fiel a su espíritu humilde y obediente y al lema episcopal que escogió: “Doy mi vida por mis ovejas” y lo hizo con amor y siguiendo el ejemplo del Buen Pastor que había siempre animado todo su apostolado. 








Espiritualidad


Durante su servicio pastoral, bien sea como capuchino o como obispo, se distinguió por su profundo amor a Dios y por su confianza en la Divina Providencia: esto lo llevó a poner en sus manos todo proyecto, en la certeza que, si la obra respondía a la voluntad de Dios, llegaría a realizarse. Y de esto tuvo muchas pruebas sobre todo en el ámbito de sus dos congregaciones que, a pesar de tantas dificultades que tuvieron que enfrentar, lograron crecer y afirmarse.

Otra característica de la vida del Padre Luis que merece ser destacada es su amor para los pobres, la defensa de su dignidad humana como hijos de Dios y su preocupación en darles a conocer a Dios y su amor para con ellos.


Muerte y proceso de beatificación


El Padre Luis murió el día 1 de octubre de 1934 en Godella, (Valencia), en la casa madre de los Hermanos Terciarios Capuchinos: Lo rodeaban muchos de sus hijos e hijas y fue enterrado en Massamagrell, en la capilla de la casa madre de las Hermanas Terciarias Capuchinas. Su tumba es lugar de peregrinación y veneración por parte de muchos feligreses.

El día 13 de junio de 1992 marcó una etapa importante en el proceso canónico de beatificación: el santo Padre Juan Pablo II lo declaró Venerable y la Iglesia se pronunció sobre él definiéndole como “Gigante de la santidad, modelo y prototipo de religioso, sacerdote, fundador y obispo". En este momento está al estudio uno de los milagros atribuido a su intercesión.